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miércoles, mayo 18, 2016

EL SALMOREJO…¿ENGORDA?

EL SALMOREJO…¿ENGORDA?

Juan Antonio Rayo.www.demesaenmesa.es

DE MESA EN MESA. Revista Gastronómica.


El salmorejo es una crema servida habitualmente como primer plato; se trata de una preparación tradicional de Córdoba. Se elabora mediante un majado (machacado, triturado) de una cierta cantidad de miga de pan, a la que se le incluye además: ajo, aceite de oliva, vinagre (opcional), sal y tomates. Debido al empleo del pan, su consistencia final es la de un puré, o el de una salsa, se suele servir con pedacitos de otros alimentos en su superficie como: virutas de jamón, picatostes, o con huevo duro. Por los ingredientes empleados se trata de un alimento y preparación bastante económico. Es frecuente servirlo fresco.
 
DE MESA EN MESA EL SALMOREJO…¿ENGORDA?

EL SALMOREJO…¿ENGORDA? Receta Salmorejo.

El posible origen del salmorejo, entendido como lo es en la actualidad, se remonta a un periodo que va desde el siglo XIX o comienzos del siglo XX, donde el último ingrediente a incluir en la popular receta fue el tomate.
Sus orígenes corresponden a los de un plato humilde que fue popularizado lentamente fuera de Andalucía a lo largo del siglo XX.
En la cocina española existe polisemia con otro tipo de preparaciones.
Es por esta razón por lo que cabe destacar que, a pesar de haber sido aceptado el salmorejo como una especie de gazpacho espeso.
Posee algunas similitudes con el popular gazpacho; entre las diferencias cabe destacar el abundante uso de pan en su elaboración que hace al salmorejo más denso. Por otra parte, el salmorejo emplea como verduras únicamente tomate y ajo, mientras que el gazpacho se elabora con otras hortalizas como son el pepino, pimiento y cebolla.
Es un alimento bajo en calorías rico en fibra vegetal, lo que favorece la digestión, en vitamina C, licopeno y vitamina E, debido al aceite de oliva. Tiene ajo, que le da carácter vasodilatador  beneficioso para la circulación.
La gastronomía cuenta con una larga lista de inventos geniales que carecen de autoría. Es el caso del humilde salmorejo. Es un plato delicioso y lleno de virtudes, por sus propiedades nutritivas y su receta baja en calorías. El Instituto de la Obesidad (IOB) lo propone como un básico de la alimentación de aquellos que sufren obesidad o sobrepeso.
Es un ejemplo de lo que le conviene a nuestro organismo. Es un alimento bajo en calorías.
Recuerda el IOB que se trata de una receta rica en fibra vegetal, lo que favorece la digestión, en vitamina C, licopeno y vitamina E, debido al aceite de oliva. Este proporciona, a su vez, un excelente perfil de ácidos grasos cardiosaludables.
Además tiene ajo, que le confiere un carácter vasodilatador muy beneficioso para la circulación, mientras que la presencia del jamón serrano aporta hierro, proteínas y vitamina B12.
Al tratarse de un alimento cuyos ingredientes están crudos, se ingieren todas las enzimas de los vegetales en estado vivo, manteniendo intactas las propiedades nutritivas de los tomates vitaminas y minerales al no necesitar calor para procesarlas.
Hoy la receta va dedicada a mi madrina , que una vez se lo hice y la encanto, y, cada vez que me ve me lo recuerda y  me pide que se lo haga.

Salmorejo.
Ingredientes para 6 personas:
1 kilogramo de tomates rojos bien maduros.
200 gramos de pan ( que tenga un dia o dos).
150 ml de aceite de oliva.
1 diente de ajo.
sal (al gusto).

Preparación:
Limpiamos bien los tomates y los troceamos, los añadimos a un bol grande, vaso de batidora o robot y trituramos hasta que nos quede una salsa líquida.
Tenemos que tener cuidado que no nos caigan ni pepitas ni trozos de piel.
Cortamos el pan en trozos pequeños y los añadimos a la crema de tomate, lo dejamos reposar 10 minutos. Así ayudamos a que el pan se ablande.
Pelamos el ajo y, lo echamos al tomate con el pan, el aceite y la sal. Batimos hasta que nos quede lo más fino posible. Probamos de sal.
Lo metemos en la nevera y dejamos que se enfríe.
A la hora de servir, ponemos tacos de jamón serrano o ibérico, huevo cocido y unas gotitas de aceite de oliva.
Ya tenemos un nuevo plato para hacer .

BUEN PROVECHO.

sábado, abril 09, 2016

Conoce lo que que comes-El Melon-Receta-de Melón con jamón en tempura

Conoce lo que que comes-El Melón-Receta-de Melón con jamón en tempura.
EL MELÓN.
Juan Antonio Rayo. www.demesaenmesa.es
DE MESA EN MESA. Revista Gastronómica.

El Cucumis melo, más conocido como melón, es una planta herbácea monoica de tallos rastreros. Se cultiva por su fruto, una baya pepónide de temporada veraniega aunque ya se encuentra todo el año, al menos la mayor parte, con un gran contenido de agua y sabor dulce.
El melón ya se cultivaba en el Antiguo Egipto durante el III milenio a. C., y su cultivo se extiende por la mayoría de los continentes.
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El uso medicinal del “melón”, lo demuestra su presencia en la Capitulare de villis vel curtis imperii, una orden emitida por Carlomagno que reclama a sus campos para que cultiven una serie de hierbas y condimentos incluyendo los “pepones” identificada actualmente como Cucumis melo.
Necesita por lo menos 15ºC para germinar; la siembra se hace durante el periodo libre de heladas y al aire libre, a mediados de primavera. El crecimiento de la planta no es verdaderamente activo hasta que se sobrepasan los 15ºC, situándose el óptimo hacia los 32ºC. Resiste la sequía mejor que el maíz. Es capaz de sufrir sequía durante un período bastante largo, y reemprender su crecimiento más adelante cuando cesa la sequía. Por otra parte, necesita menos cantidad de agua que el maíz para formar un kilogramo de materia seca.
Se desarrolla bien en terrenos alcalinos, sobre todo las variedades azucaradas que exigen la presencia en el suelo de carbonato cálcico, lo que aumenta el contenido en sacarosa de tallos y hojas. Prefiere suelos sanos, profundos, no demasiado pesados. Soporta algo la sal.
Es un mal precedente de otros cultivos, particularmente para los cereales de otoño. Al regar debe evitarse que el agua, toque las hojas, pues es fácil que se pudra la planta; por eso no se siembra en bancales  y se prefiere hacer riego por surcos. También se puede cultivar en terrenos de secano e incluso los frutos pueden resultar más sabrosos, pero los rendimientos potenciales son menores. Es necesario hacer despulgue (rales de hojas) para evitar que crezca muy vigorosa y produzca demasiadas flores masculinas y pocas femeninas, que van a originar los frutos. En invernadero se cultivan melones que producen precozmente. Estas plantas crecen verticalmente y se sostienen con la ayuda de cuerdas.
El fruto no debe cosecharse hasta que la madurez esté asegurada, y el contenido de azúcar sea lo suficientemente elevado. Al tacto ésta se percibe cuando la corteza alrededor del pedúnculo cede ligeramente a la presión de los dedos; el peso específico del melón también es un índice característico, aumentando a medida que la madurez incrementa la densidad de la pulpa.
Se distinguen varios tipos, con múltiples variedades, los más cultivados son amarillo, galia, melón verde y piel de sapo.
Hasta hace más de una década aproximadamente, España era el país que mayor cantidad de toneladas de melones exportaba mundialmente, seguida de Estados Unidos, pero la exportación a nivel mundial de este fruto ha crecido y países como  Estados Unidos, Francia, Ecuador, Colombia y otros, son los territorios  que suelen incluirse entre los mayores exportadores del producto.
Si quieres bajar de peso y descansar cada noche, una buena idea es que empieces a comer más melón, una fruta deliciosa y refrescante.
Es bajo en calorías. Cada 100 gramos nos aporta 34 calorías. Además es bajo en grasas, pero si muy rico en nutrientes como vitaminas y minerales.
Tiene una buena cantidad de vitamina A, siendo la fruta que más la contiene. Un poderoso antioxidante bueno para la piel y las mucosas.
Ofrece flavonoides que protegen las células de los radicales libres, reduciendo la posibilidad de padecer cáncer de páncreas, de mama o de colon.
Mejora nuestra visión y evita a su vez la degeneración macular, frecuente por el paso de los años.
Controla la frecuencia cardíaca y la presión arterial debido a su contenido de potasio, lo que evita enfermedades relacionadas con el corazón.
Ayuda al cuerpo a resistir enfermedades provocadas por infecciones, virus y bacterias, al tener vitamina C y manganeso.

Aquí va la receta no podía faltar.
La manera más conocida es melón con jamón, pero hoy además lo haremos con tempura.
Melón con jamón en tempura.
Ingredientes para 2 personas:
1 rodaja grande de melón.
8 lonchas de jamón.
1 cebolleta.
135 gramos de harina de tempura.
100 gramos de queso azul.
una cucharada de mantequilla.
dos cucharadas de nata líquida.
200 ml de agua fría.
1 vaso de leche.
aceite de oliva.
sal y pimienta.
nuez moscada.
perejil picado.
Preparación:
Para la salsa de queso, ponemos la mantequilla a derretir en un cazo. Incorporamos la cebolleta finamente picada. Cuando esté pochadita, añade el queso troceado, la nata y la leche. Removemos, condimentamos con un poco de nuez moscada sal y pimienta. Cocinamos durante 5 minutos. Espolvoreamos  perejil picado. Reservamos. Pelamos y cortamos el melón en rectángulos (como de bocado). Escurrimos el exceso de agua sobre papel absorbente. Envolvemos jamón. Cerramos con un palillo.
Mezclamos la harina de tempura con el agua lo más fría posible de la nevera y removemos hasta conseguir una pasta ni muy ligera ni muy espesa. Pasamos los pinchos y los freímos en abundante aceite bien caliente. Escurrimos sobre papel absorbente. Para servir, colocamos la salsa de queso en el fondo del plato y encima el melón.

Buen provecho.